Antonio no supo qué mas hacer y echó a correr. Lo hizo tan confundido que no supo si recorrió kilómetros o solo unos cuantos metros, tampoco se dio cuenta si se tardó minutos o tal vez horas. Nunca supo si había logrado escapar.
Ella lo persiguió por un tiempo, pero a mitad de camino desistió, era innecesario, finalmente siempre iba a estar con él, en su recuerdo.